Sabemos que la influencia de los otros sobre nuestro comportamiento es determinante. Todos los que nos dedicamos a esto lo recomendamos: usar el marketing de influencer aumenta tu alcance como marca. La importancia de los influencers es tanta, que incluso la revista Forbes hace anualmente una lista de los principales influencers (en Estados Unidos) basándose en las categorías o sectores donde ejercen su influencia. Entre todos, dice el artículo, tienen 250 millones de seguidores en las redes sociales. Algunos pueden hacer hasta 300,000 dólares por vídeo en YouTube. Y otros tienen una audiencia en Instagram mayor que la población de Nueva York.
Tanto es así que ser influencer se ha convertido en una salida profesional. La Universidad Autónoma de Madrid ofrecerá un curso para ser influencer profesional, con materias sobre economía, negocios, comunicación y psicología. No es cualquier cosa: este negocio factura 14 millones de euros anuales en España y alrededor de 1.000 millones en el mundo.
Por qué contratar a un influencer
Un influencer es una persona que influye. Es una persona que por su importancia o reconocimiento en un determinado sector tiene un gran impacto en las redes sociales y puede llegar a influir en la toma de decisiones de sus seguidores. Se estima que para el año 2020 el marketing de influencers supere los 10.000 millones de dólares. Por lo que no es extraño que todas las empresas, al menos las que puedan permitírselo, confíen en estos prescriptores.
Sin embargo, hay que tener cuidado. Como dice Susana Carrizosa en este artículo de El País, contratar a personas que parecen influyentes puede tener sus riesgos. Y, en realidad, podríamos estar ante una enorme burbuja de negocio de la que es mejor mantenerse alejado. O, al menos, participar de manera informada.
Dos son los motivos de esta anunciada debacle: el fraude en los followers y la ambigüedad en torno a los contenidos patrocinados, de los que la consultora Mediakix prevé 21,7 millones de publicaciones en 2018 y 32,3 millones en 2019. La compra de seguidores y de autolikes es una práctica habitual que cualquiera puede hacer en Internet. Así, a través de granjas de bots, que operan presuntamente desde China, Turquía, Rusia o Brasil, se pueden adquirir 50.000 ‘me gusta’ por 58,72 euros, o paquetes de comentarios por dos euros.
Cómo evitar riesgos al contratar a un infuencer
Luis Díaz, consejero delegado de H2H, recomienda ponerlos a prueba. Recomienda que las marcas realicen análisis de calidad. De esta manera pueden descartar que sea un robot o un pod.
Para que la campaña sea un éxito, es primordial elegir bien a la persona, ya que el error más extendido es escoger al que goza del engagement más alto”.
Entre los tres tipos de influyentes que podemos encontrarnos -celebridades, surgidos en redes sociales o microinfluencers-, los más eficaces son estos últimos ya que tienen una mayor autoridad sobre sus comunidades, aunque estas sean más pequeñas.
Y, no obstante, es importante recordar que pese a que el marketing de influencer esté de moda, las encuestas siguen indicando que la influencia de amigos y familiares es mucho más determinante que la de cualquier otro profesional.